Desde que se popularizara la herramienta de inteligencia artificial generativa ChatGPT hace ahora poco más de un año, muchos profesionales del marketing han comenzado a observar con cierta cautela este avance.
Por un lado lo ven como una nueva oportunidad de progresar en la profesión, pero por otro lado asumen ciertos miedos al comprobar que las máquinas pueden poner en riesgo muchos trabajos. La visión optimista nos debe llevar a considerar a aplicaciones y herramientas de inteligencia artificial más como una ayuda que como un rival.
En este sentido, los buenos marketeros no deben temer a que aparezcan innovaciones en la disciplina, sino saber subirse al carro y optimizar su capacidad para ofrecer productos y servicios. A este escenario camina el email marketing. Ya hay muchas empresas que plantean utilizar aplicaciones de IA para lanzar mensajes automatizados que parezcan tan reales y naturales como lo haría la comunicación humana.
Para ello es importante que la herramienta de IA disponga de información reciente sobre el usuario o el destinatario que está al otro lado. Y por supuesto, que el gestor de correos electrónicos sea de garantía, como ocurre con Mailrelay, que cuenta con capacidad suficiente para hacer envíos masivos, dispone de cuenta gratuita y ofrece opciones de diseño atractivas para el usuario.
La contribución de la IA en el email marketing
Con todo esto, la inteligencia artificial en el email marketing ayuda a mejorar la experiencia tanto para los destinatarios de esos envíos como para los remitentes. En el primer caso hay que destacar el trabajo tan logrado que han conseguido muchos software de correo electrónico para optimizar la bandeja de spam o para filtrar emails por categoría, de modo que los correos queden mejor encajados.
Los remitentes, quienes envían los correos, pueden echar mano de funciones de redacción inteligente. O hasta de programas que captan la voz para redactar correos a partir de mensajes hablados.
¿Y el aporte para los profesionales del marketing?
Los avances citados tienen interés para cualquier usuario de correo electrónico. Pero el verdadero valor de la IA no radica en ayudas simples pero atractivas, sino que está en los beneficios que puede prestar a los profesionales del email marketing.
Tiempos de envío cuidados y optimizados
Todo experto en redes, email y canales de difusión trata de investigar cuál es el mejor momento para lanzar sus mensajes. Esto es algo que se va descubriendo con la experiencia, pero también con el análisis a partir de métricas.
Y es ahí donde puede entrar la IA, junto con el Big Data, por su capacidad para examinar toda la información a la que tiene acceso. En este escenario también hay que tener en cuenta cuestiones como la audiencia a la que van dirigidos los mensajes.
Recomendaciones de productos
Todo lo que hacemos en internet deja rastro. Navegar por diferentes páginas web permite a las empresas acceder a información sobre intereses, gustos y necesidades que son captadas por los algoritmos y posteriormente se ven reflejadas en anuncios específicos para cada tipo de público.
Esto, que resulta muy invasivo con los anuncios digitales y las notificaciones push para móviles, queda mucho más natural a través del correo electrónico, pues las marcas solo llegan a los contactos que de manera directa han aceptado recibir comunicaciones. La IA entra aquí para recopilar e integrar esos datos que recibe de los usuarios y posteriormente recomendar productos. Pero lo hace solo a los potenciales clientes que han aceptado recibir la información.
La IA para analizar el feedback de los clientes
El correo electrónico es una de las vías de contacto más efectivas que existe entre empresas y clientes, especialmente cuando hablamos de usuarios que voluntariamente deciden recibir notificaciones a través de este canal.
Esto convierte a los emails en una opción lógica para enviar formularios de feedback, escenario donde la IA va a jugar un papel esencial. Las herramientas de inteligencia artificial ayudan a procesar mejor las respuestas cualitativas, a agrupar los resultados de encuestas en categorías definidas, a preparar preguntas de encuesta para grupos de destinatarios, a diseñar y enviar mensajes automáticos basados en las respuestas recibidas y a priorizar las soluciones en función de los comentarios de los clientes.
En esencia, la IA es un avance tecnológico al que no deben renunciar los profesionales del marketing. En email marketing se está demostrando como una ayuda esencial para hacer más estrecha la relación entre empresas y clientes. ¿Vas a tomar una actitud temerosa ante estas innovaciones, o prefieres coger el timón y convertirte en un mejor profesional?
